Rodríguez Ennes manifestó ayer su alegría por este acuerdo unánime que le permitirá continuar en la docencia. "Estaré eternamente agradecido a la Universidad de Vigo -mi Universidad- por haberme conferido 'nemine discrepante' (por unanimidad) y en menos de cinco días, dos de las más importantes distinciones de toda mi larga vida académica, que son el nombramiento de decano honorífico de mi Facultad y el emeritazgo", señaló. En la antigua Roma los legionarios que se licenciaban con honores recibían el título de "eméritos" y una parcela de tierra para cultivar. "Un servidor -apunta-, haciendo honor a dicha condición, seguirá sembrando la semilla de la ciencia jurídica en las conciencias de sus discípulos y alumnos".
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